Quiport plantea una serie de alternativas sostenibles para aumentar su apoyo al medio ambiente. Estas se centran en la reducción de los plásticos en las salas VIP e incluso la sistematización del aire acondicionado dentro del aeropuerto. Estos pequeños pasos son muy significativos porque el aeropuerto de Quito durante años ha estado dentro del programa del Consejo Internacional de Aeropuertos para cumplir con los parámetros y trazar la ruta de descarbonización y de huella de carbono.
Con base en ello, actualmente se encuentran en una fase de transformación en donde incentivan a los negocios que brindan servicios al aeropuerto a ser más conscientes de su impacto en el planeta. Las alianzas estratégicas permiten involucrar a más personas en este proceso de convertir a Quiport en un lugar con conciencia verde y sin huella de carbono.
Este es un cambio muy positivo porque significa que cada uno de los procesos que se llevan a cabo van a ser totalmente descarbonizados y que la empresa está enfocada en mejorar su sostenibilidad y reducir el consumo de energía mediante una sistematización eficiente.
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Además de optimizar el consumo de energía, el aeropuerto está implementando paneles solares para aprovechar la energía limpia, garantizando el funcionamiento adecuado de sus equipos. Sin embargo, su compromiso con el medio ambiente va más allá de cuestiones estructurales: también se preocupa por el bosque protegido en su área.
Se han emprendido acciones de reforestación y mantenimiento para conservar este bosque, contribuyendo así a la captura de carbono y al equilibrio ambiental. Estas medidas son cruciales, ya que, siendo un aeropuerto internacional, tiene la responsabilidad de cuidar el medio ambiente y promover la sostenibilidad. El compromiso del aeropuerto de Quito en este aspecto es evidente y ecoamigable.
